Aceite de sesamo
El aceite de sésamo, una variedad exquisita en la gastronomía, se extrae de las semillas del sésamo, también conocidas como ajonjolí. Este proceso de obtención permite aprovechar las propiedades nutricionales y aromáticas de estas semillas para enriquecer una diversidad de platos.
Este aceite se caracteriza por tener una textura fluida a temperatura ambiente, lo que facilita su aplicación y uso en distintos tipos de preparaciones culinarias. Destaca por su aroma y sabor tostado e intenso, similar al de los frutos secos, que aporta un matiz único a los platos en los que se incluye.
El aceite de sésamo posee un color oscuro que evidencia su intensidad aromática y saborizante. Es un ingrediente predilecto en la preparación de comida asiática, donde se usa tanto para cocinar vegetales en crudo como para añadir un toque final a sopas, aliños de ensaladas, salteados, adobos, y marinados. Su uso es tan versátil que es frecuente añadir una gota en las sopas justo en el momento de servir, proporcionando un toque de sabor extra.
Es importante notar que existen múltiples variaciones en el color del aceite de sésamo, influenciadas por el proceso de extracción empleado. Por ejemplo, el aceite que ha sido prensado en frío carece de color. Esto se debe a que las semillas no son tostadas previamente, lo que produce un aceite más ligero pero con las mismas propiedades nutricionales. Este tipo de aceite es ideal para quienes prefieren un sabor más suave sin perder los beneficios del sésamo.
